Un avioncito de palabras hasta donde llegue
Él repasa el manual de instrucciones que no ha necesitado para acercarse a cada defensa y hacerla trizas. Yo estoy ahí sentada y estoy pensando que qué chico más listo.
Él dice que no sabe cómo encontrarse, entonces, cómo sabe encontrarnos hasta sacarnos de debajo de las sillas, hasta hacernos nacer...
Conoce muchísimas palabras por dentro: amapola, cincel y lapicero. Sobre todo, lapicero, palabra que le extraña con esa extrañeza que produce lo ajeno y que nos sirve para mirarlo todo con nuevos ojos.
Él sueña con encontrar un nuevo signo. No sabe todavía que lo tiene, que lo es.
bien