Calle rectilínea y larga
Yo me he comprado uno finito, 150 páginas.
No voy a viajar este verano. Retorno 201, de Guillermo Arriaga, recomendación de Punta Umbría (por cierto, qué frío hacía en el msn la otra tarde). Con las referencias argumentales de Amores Perros, 21 Gramos y Los tres entierros de Melquíades Estrada, sé que estos cuentos nacidos al sur de la Ciudad de Méjico me van a encandilar, que diría mi compañero.
Las tres pelis me gustaron por su sabor amargamente humano, sonrisas por debajo del suelo, sólo para excavadores de sentimientos, ardores no amortiguados, lenguas agrietadas por verdades y por mentiras, espacios terribles.
Es raro que en la solapa, Arriaga se defina a través de cosas con las que me identifico un total de nada, como su horóscopo, su afición al fútbol, la caza y el boxeo, su condición de abstemio... Menos mal que admira a los intensos, a los que van con todo, a los que no se detienen: a los hombres y las mujeres que dejan pedazos de piel por donde caminan.
Por ahí nos encontramos los amorosos.
Esta mañana me he levantado con una duda y con dolor de cabeza. Se me ha pasado el dolor y no pienso buscar respuestas.
Intensa si loeres .
:-)